Salmo 36 | Explicación y cómo aplicarlo en la vida

8 Serán completamente saciados de la grosura de tu casa,

Y tú los abrevarás del torrente de tus delicias.

Salmo 36:8

9 Porque contigo está el manantial de la vida;

En tu luz veremos la luz.

Salmo 36:9

10 Extiende tu misericordia a los que te conocen,

Y tu justicia a los rectos de corazón.

Salmo 36:10

11 No venga pie de soberbia contra mí,

Y mano de impíos no me mueva.

Salmo 36:11

12 Allí cayeron los hacedores de iniquidad;

Fueron derribados, y no podrán levantarse.

Salmo 36:12

Salmo 38 | Explicación y cómo aplicarlo en la vida

Explicación del Salmo 36

El impío, en lugar de atender a la voz de Dios, escucha al pecado. Cuando las personas siguen al pecado, generan corrupción y división; mientras que oír la palabra de Dios ocasiona que haya fe en el corazón. David indica que el corazón humano se ha degradado hasta el punto de que el pecado se ha convertido en su dios. De igual manera que es importante un 'así dice Jehová' por parte de los profetas, los deseos del corazón basados en el pecado son relevantes para un transgresor. 

Hay dos voces que escuchamos en nuestro corazón. Por un lado, está la voz de Dios; por otro lado, la del pecado. Si no tenemos el cuidado necesario, es probable que estemos escuchando la voz del mal. Procuremos desarrollar la certeza de que estamos andando por los caminos del Señor. Las personas que optan por escuchar al pecado y hacer el mal, son los que hacen insensible su corazón al temor de Dios. 

Dicho temor, que es tan preciso en la vida de los hombres, es lo que nos aparta de las malas andanzas. Este tipo de personas hacen el mal sin tener algún remordimiento. Suelen rechazar las correcciones del Espíritu Santo para que ellos se vuelvan del mal camino y comprendan la palabra de Dios.

Las personas que no sienten temor de enfrentarse a Dios cara a cara, después de haberlo blasfemado, se encuentran en una situación muy preocupante: su futuro, salvación y consciencia, peligran. 

Desde versículo 2 al 4 nos expresan la visión general del impío. El pecado les hace suponer que no hay quién se entere de sus maldades, y que no serán condenados por su actuar. Las personas que viven bajo este ideal están complacidos de obedecer las tendencias del pecado, y se sienten libres de culpa. En Deuteronomio 29:19 y salmos 10:3, encontramos más sobre este tipo de comportamiento. 

El resto del salmo se ocupa de darnos una comparativa de la forma de ser del impío. Destacando sus características principales, que son despreciables ante los ojos del Padre. 

Cómo aplicar el Salmo 36 en la Vida

Este salmo puede aplicarse de diferentes formas en nuestra vida, para esto debemos comprender el mensaje que encierra. ¡Aquí te explicaremos más sobre esto!

Siempre debemos tener en mente las palabras de Jesús: “no hay nada oculto que no haya de ser descubierto, ni escondido que no haya de salir a la luz”. Eclesiastés nos dice: “Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa oculta, sea buena o sea mala”, por lo tanto, no hay que suponer que habrá cosas que queden para siempre ocultas, que es uno de los mensajes centrales del salmo 36.

El malvado está basado en un gran engaño que ha decidido creer por sí mismo. Tarde o temprano su maldad se hallará. Estas personas están tan equivocadas que suponen que jamás recibirán las consecuencias de sus acciones, sin embargo, el Señor es un juez justo, y tarde o temprano hará justicia. No solo en este mundo, sino también en el venidero. 

En los versos de este salmo, el poeta comenta lo poco valiosas que son las palabras de los impíos. Pasajes similares encontramos en salmos 5:9, salmos 12:2-3 y proverbios 6:12.

Toda la maldad que el pecador tiene en su corazón, será expresada tarde o temprano por su boca. Esto redundará en un conjunto de acciones que terminarán afectando a todos aquellos que le rodean. Y lo comprendemos cuando meditamos en el principio bíblico: "de la abundancia del corazón habla la boca". 

Este salmo nos permite comprender la posición y futuro del impío. Apliquémoslo en la vida decidiéndonos por seguir los caminos de Dios, y apartándonos del mal. La finalidad de este salmo es que comprendamos la mentalidad de los malvados y procuremos evitar desarrollar un comportamiento similar. 

Preguntas frecuentes del salmo 36

Algunos cristianos pueden tener ciertas dudas relacionadas con el salmo 36. En este apartado te las solventaremos. 

¿Qué significa el salmo 36?

Este salmo es un llamado para la conversión del malvado, de forma que pueda apartarse de los caminos de perversidad y orientarse a los mandamientos de Dios. 

¿Quién escribió el salmo 36?

Fue escrito por el rey David.

¿Qué quiere decir el salmo 36?

A través de este escrito comprendemos un poco la mentalidad de las personas pecaminosas y podemos hacer una comparativa con nuestro comportamiento, de manera que orientemos nuestras acciones a los caminos del Padre.